martes, 17 de enero de 2017




     Golondrina sola / de invierno en una rama / entre los pinos musculares / de mi cuerpo no te vayas, / vasto jardín de la espera / no te mueras, que el insensato / adolescente es peligroso, y es / el espejo que rompe mi carne.










domingo, 15 de enero de 2017




     El niño que jugaba con las oportunidades de los otros, si no se metía en camisas de once balas el mal día lo tenía asegurado. Le hablaban de amor y entonces era cuando más tenía qué decir. El premonitorio final de la tarde a pasos violentos le incomodaba, pero no había más que estrenar su nueva sonrisa. No había quedado con ella, pero la esperaba siempre.







miércoles, 11 de enero de 2017




     Suscribir la ausencia, sobretodo la que sufrirán los niños. Creo que alguien ha escrito ya desde que te vas hasta que casi nunca vuelves pero la que se va eres tú, y nadie mejor que yo te conoce.

















martes, 10 de enero de 2017




     Soy un cero a la izquierda y no me engañan, sé que tanto o más valgo yo, como aquel que vive a la derecha.















lunes, 9 de enero de 2017




     Disculpen por favor la tardanza, sé que no son horas, pero tengo algo importante que deciros: Siempre supe que la expresión a plena luz del sol significaba otra cosa pero nunca hasta hoy se me había mostrado tan clara la idea que pretende. A lo que voy es a que una cosa es permanecer en silencio y otra muy distinta, y esta es la dolorosa, hablar en otra parte.







domingo, 8 de enero de 2017




     Será porque pienso en ella como si fuera hija mía, que increíblemente vivo los momentos que ella vive, me arrodillo en la alfombra del salón para jugar con ella, lloro cuando ella llora, no duermo para que ella duerma, y deseo verla correr en alguna playa libre de culpa porque al fin unos pocos kilómetros no han sido nada, pero esta tristeza que arrastro no es para una niña, por eso muchas veces cojo mis cosas y me voy, o eso digo, digo que me voy hacia la búsqueda de ser sólo pureza y alegría de haber conocido a quien le da de comer, a quien amo, cuyo nombre llevo escrito en los pulmones.




miércoles, 4 de enero de 2017




     Espejo, ese tipo que, perplejo, pero con respeto y buen estar, atendió las quejas de los hombres enamorados y ninguno era tan hombre como decía para desobedecer al corazón, lo que le sacaba una leve sonrisa cuando nadie estaba mirando. Hasta que el tiempo tomó la palabra.